Lección 2.9 Inmigración Algunas culturas podrían ser mejor que otras

Comentarios al libro 21 lecciones para el siglo 21 de Yubal Noah Harari

Parte 7 de 14

Tiempo de lectura: 10 minutos

Barca en el Mediterraneo, ¿Hasta cuando?

        Introducción    

A medida que cada vez más humanos cruzan más fronteras en busca de trabajo, seguridad y un futuro mejor, la necesidad de enfrentarse, de asimilar o de expulsar a extranjeros ponen en tensión a los sistemas políticos y a las entidades colectivas que se crearon en épocas menos fluidas.     En ningún lugar es más agudo el problema de la migración que en Europa. La Unión Europea se construyó sobre la promesa de trascender las diferencias culturales entre Franceses, Alemanes, Españoles y Griegos. Esta podría desmoronarse debido a la incapacidad para resolver las diferencias culturales entre Europeos e inmigrantes de África y Oriente Próximo.

Los Sirios prefieren emigrar a Alemania antes que a Arabia Saudí, Irán, Rusia o Japón; no porque Alemania esté más cerca o sea más rica que los demás destinos potenciales; sino porque Alemania tiene un historial mucho mejor a la hora de recibir de buena manera y asimilar a los inmigrantes.

    Algunos Europeos claman porque se abran las puertas a más inmigrantes, otros simplemente los rechazan.  Algunos anti-inmigracionistas destacan que uno de los derechos más básicos de cada colectivo humano es defenderse contra la invasión; ya sea en forma de ejércitos o ya sea de inmigrantes. Los Suecos por ejemplo, han trabajado con mucho ahínco y han hecho numerosos sacrificios para crear una democracia liberal próspera. Si los Sirios no han conseguido hacer lo mismo, no es culpa de los Suecos. Y si los votantes Suecos no quieren que entren más inmigrantes Sirios en su país por la razón que sea, están en su derecho de negarles la entrada. Si aceptan algunos inmigrantes debería quedar muy claro que es un favor.

        Lo que significa que los inmigrantes a quienes se les permite entrar a Suecia tienen que sentirse agradecidos por ello, en lugar de llegar con una lista de peticiones como si fueran los dueños del lugar.    

Esta discusión sobre la inmigración suele degenerar en una pelea a gritos en la que ninguna parte escucha a la otra. Para clarificar las cosas quizá ayude contemplar la migración como un pacto con 4 condiciones o términos básicos, según Yubal Noah:

    Término 1.-  El país anfitrión permite la entrada de inmigrantes en su territorio.

    Término 2.-  A cambio, los inmigrantes deben adoptar las normas y los valores fundamentales del país anfitrión, aunque esto implique abandonar sus normas y valores tradicionales.

    Término 3.-  Los inmigrantes se asimilan y hasta cierto grado con el tiempo se convierten en miembros iguales y completos del país anfitrión. “Ellos” se transforma en “Nosotros”.

Esos tres términos dan origen a tres debates sobre el significado exacto de cada término. Un término 4 concierne a su cumplimiento. Cuando la gente habla de inmigración confunde los cuatro términos, por tanto es mejor considerar cada uno de dichos debates por separado.

    Debate 1.-  Los pro-inmigracionistas parecen pensar que los países tienen el deber moral, de aceptar no sólo a los refugiados, sino también a personas de países azotados por la pobreza, que buscan trabajo y un futuro mejor, en especial en un mundo globalizado. Todos los humanos tienen obligaciones morales hacia los demás humanos. Quienes no lo reconocen son egoístas e incluso racistas.     De modo que es mejor legalizar la inmigración y tratar con ella abiertamente ,en vez de crear un enorme submundo de tráfico humano, trabajadores ilegales y niños sin papeles.

    Debate 2.-  ¿Los inmigrantes deberían de abandonar sus códigos tradicionales de vestimenta y sus tabúes alimentarios? Los anti-migracionistas tienden a poner el listón más alto, mientras que los pro-inmigracionistas lo colocan mucho más abajo. Unos alegan que la misma Europa es muy diversa y que sus poblaciones nativas cuentan con un amplio espectro de opiniones, hábitos y valores. Eso es lo que hace precisamente que Europa sea dinámica y fuerte.

    Si Europa cuenta con algunos valores fundamentales reales, son los valores liberales de la tolerancia y la libertad. Lo que implica que los Europeos deben mostrar tolerancia también hacia los inmigrantes y concederles tanta libertad como sea posible para que sigan sus propias tradiciones, siempre que éstas no perjudiquen las libertades y los derechos de otras personas.     Todos estan de acuerdo en que la tolerancia y la libertad son los valores Europeos más importantes y acusan a muchos grupos de inmigrantes, sobre todo procedentes de países musulmanes de intolerancia, misoginia, homofobia y antisemitismo. Justo por ese valor de la tolerancia no se pueden permitir demasiadas personas intolerantes en su seno.

Si los inmigrantes tienen algún problema con determinadas peculiaridades de la cultura Británica, Alemana o Sueca se vería con buenos ojos que se vayan a otra parte.     Al contrario, si los inmigrantes en su mayoría demuestran ser liberales y tolerantes en su actitud hacia la religión, el género y la política, esto eliminaría algunos de los argumentos más efectivos contra la inmigración.

La tolerancia es un valor universal, mientras los Europeos están irreconciliablemente divididos respecto a estas cuestiones, apenas tendrán una política clara acerca de la inmigración y al revés.     Una vez que los Europeos sepan quiénes son, 500 millones de europeos no deberán tener ninguna dificultad en acoger a varios millones de refugiados o en prohibirles la entrada como un bloque homogéneo.

    Debate 3.-  La tercera cláusula del pacto de inmigración dice que si los inmigrantes hacen un esfuerzo sincero por integrarse y en particular adoptar el valor de la tolerancia, el país anfitrión está obligado a tratarlos como ciudadanos de primera. ¿Cuánto tiempo ha de pasar antes de convertirlo en pleno derecho? ¿Una generación, o dos? ¿O que hay de aquellos que llegaron a Francia en 1970?

La cuestión clave de este debate se refiere a la brecha entre la escala temporal personal y la escala temporal colectiva. Desde el punto de vista de los colectivos humanos, 40 años es un período corto. No puede esperarse que la sociedad asimile completamente a grupos extranjeros en cuestión de unas pocas décadas.     En las civilizaciones del pasado que asimilaron extranjeros y los hicieron ciudadanos de pleno derecho, como la Roma Imperial, el Califato Musulmán, los Imperios Chinos y Estados Unidos, se tardaron siglos y no décadas en conseguir la transforma.

Los humanos pueden pensar y comportarse de diversas maneras; pero debemos celebrar dicha diversidad y conceder igual valor a todas las creencias y prácticas. Por desgracia, esas actitudes abiertas no soportan el peso de la realidad. La diversidad humana puede ser grande en lo que a la cocina y la poesía se refiere.

Bien pensemos en la otra manera en que las diferentes culturas se relacionan con extranjeros, los inmigrantes y los refugiados. No todas las culturas se caracterizan por el mismo nivel de aceptación. La cultura Alemana de principios del siglo XXI por ejemplo, es más tolerante con los extranjeros y está dispuesta a acoger a inmigrantes que la cultura Saudí.     Es mucho más fácil para un Musulmán emigrar a Alemania que para un Cristiano inmigrar a Arabia Saudí.

Desde 2011 Alemania ha acogido más refugiados Sirios de los que han sido aceptados por Arabia Saudí. De manera similar el peso de la evidencia sugiere que la cultura de California a principios del siglo XXI es más favorable para los inmigrantes, que la cultura de Japón.

        Japon cree que no es bueno tolerar a los extranjeros y dar la bienvenida a inmigrantes. Al menos en este aspecto la cultura Alemana es superior a la Saudí y la cultura Californiana es mejor que la Japonesa.    

El racismo tradicional estaba firmemente asentado sobre teorías ideológicas en las décadas de 1890 a 1930. Se creía de manera general por ejemplo, en Gran Bretaña, Australia y Estados Unidos que algún rasgo biológico hereditario hacía que los Africanos y los Chinos fueran de manera innata menos inteligentes, menos emprendedores y menos morales que los Europeos.

El problema residiría en su sangre. Tales opiniones gozaban de respetabilidad política, así como de un amplio soporte científico.     Hoy en día en cambio, aunque muchos individuos realizan todavía ese tipo de aseveraciones racistas, éstas han perdido todo su apoyo científico y la mayor parte de su respetabilidad política.

A menos que se replanteen en términos culturales, decir que las personas negras suelen cometer crímenes porque tienen genes de calidad inferior, no está de moda. Decir que suelen cometer crímenes porque provienen de culturas disfuncionales está muy de moda.

Comentario

Absorber la inmigración es un proceso difícil y a largo plazo. Para integrar con éxito a los inmigrantes hay que contar con el apoyo y la cooperación de la población local. La única excepción a esta norma es que los países están obligados a abrir fronteras a refugiados que huyen de la muerte en un país vecino, incluso si a la población local ésto no le gusta.

    No deberíamos ignorar nuestra responsabilidad ética con personas sólo porque viven lejos.  Con independencia de a que conclusión llega el mecanismo democrático, hay que tener en cuenta dos puntos clave: primero.- Sería erróneo que cualquier gobierno obligara a aceptar la inmigración a gran escala a su población local, poco dispuesta a ello. En segundo lugar.- Aunque los ciudadanos tienen el derecho a oponerse a la inmigración, antes de darse cuenta que tienen obligaciones para con los extranjeros; vivimos en un mundo global y nos guste o no, nuestra vida está entrelazada con la vida de personas que viven al otro lado del planeta.


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