Comentarios al libro de Jhon Gray
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Introducción
La forma de manejar las alegrías en equipo con tu pareja es muy agradable y enriquecedora, incrementa los lazos de pareja y quedan buenos recuerdos a los cuales podremos apelar más adelante. Sin embargo. El manejo del estrés de una mujer es muy diferente al método del hombre para manejar ese mismo estrés. Un conflicto muy común entre parejas es el siguiente:
Cuando Jennifer se molesta, necesita hablar de sus sentimientos, explorarlos y sentir que estos son valorados. Posteriormente siente que le hace falta que alguien que la ama, la toque, la abrace y la consuele.
Patric por su lado, cuando está molesto necesita espacio, maneja lo mismo. Pero en una forma muy distinta. Necesita alejarse para analizar lo que pasa. Se retira a rumiar lo que le está molestando. Durante esa etapa de alejamiento no le gusta que lo distraigan, ni siquiera que lo toquen.
Cuando Jennifer trata de ayudarle sin tener conciencia y respeto por sus diferencias lo más probable es que surjan problemas innecesarios.
Cuando la relación es nueva, Jennifer excusa el comportamiento de Patric imaginando que no se dio cuenta de que estaba molesta, se echa a llorar asegurándose de hacerlo en forma algo exagerado para que él la oiga. Cuando Patric la ve a llorar sale de la casa nuevamente por respeto a su privacidad, a estas alturas Jennifer está totalmente confundida y se pregunta cómo este hombre que al parecer la quiere tanto puede actuar tan indiferente y desconsiderado, entonces se siente abandonada, insultada y herida.
«No puedo creer que me ames, le dice, ¿Porqué me tratas así ?». Patric intentó ayudarla a su modo naturalmente, por eso se siente confundido y frustrado, y poco apreciado se molesta , y ya en el modo típicamente masculino, se retira en silencio a la cueva secreta de su mente para analizar y resolver lo que acaba de suceder.
Ahora tanto Patric como Jennifer están molestos, confundidos y frustrados, cada uno se esforzó cómo pudo para resolver un problema, pero la situación empeoró, ninguno de los dos tiene idea lo que realmente sucedió, ambos piensan que el otro está un poco loco, ni Patric ni Jennifer están locos simplemente son diferentes.
Los hombres se cierran con facilidad.
Cuando Patric se aleja, Jennifer empieza a sentirse culpable por ofenderlo, aunque no sabe cómo lo hizo, golpea a su puerta de forma femenina y le dice: «Entiendo que estés molesto, Patrick, hablemos. Dime cómo te sientes.»
El responde de forma masculina, «¡no siento nada! Y solo quiero estar solo». Si Jennifer sigue insistiendo en hablar, lo único que logrará es que se enoje más por la presión de ella, en realidad solo necesita un poco de tiempo para tranquilizarse. En efecto los hombres tienden a cerrarse en un instante y luego se abren con la misma rapidez. Las mujeres no lo comprenden: una vez que se abren a una persona, tardan mucho en cerrarse otra vez.
Las mujeres pueden perder la autoestima
Alice y Henry se aman mucho, sin embargo después de 6 años de casados, Alice empieza a dudar de su propia valía, está resentida con su marido, mientras que Henry ya no se siente motivado a expresar sus sentimientos en la relación. En general llega a su casa, ven el televisor y se van a dormir, a veces salen pero no hablan mucho. Cómo muchas mujeres, Alice siente una vulnerabilidad cuando se enamora. Cuando se siente amada, cuidada y tratada con respeto, se siente verdaderamente bien, de estas buenas sensaciones viene la autoestima. Pero si su compañero empieza a tratarla de un modo menos respetuoso ella no se sentirá amada, su actitud cambiara y sentirá que no merece que la amen.
La lógica de esta vulnerabilidad suena de esta manera, «si me aman y me respetan, me siento merecedora de amor y respeto, si no me aman ni me respetan es porque no soy digna de amor ni de respeto». Para compensar la lógica le dice: “si no recibo lo que necesito debo dar más antes de poder pedirlo.”
La lógica de Henry es que si hay un problema, lo esencial es hablar lo. Y si no se habla no se puede olvidar el resentimiento. En ocasiones Alice estallaba y le pedía a Henry que fuera más cariñoso. La reacción de Henry en general era quedarse callado y distante. Eso la aterraba aún mas. Desde su punto de vista, ella había intentado todo para recuperar el amor de Henry y había fracasado.
Al repetirse este patrón a lo largo de los años Alice fue perdiendo su sentido de identidad de mujer, y como resultado la pareja siguió junta pero ella era infeliz, había perdido su autoestima mientras que Henry perdió contacto con sus sentimientos de amor. Aburrido y sin motivación, Henry no tenía idea de lo que había pasado.
Los hombres pueden perder la motivación de dar
Parece que Henry tiene visión de túnel cuando tiene un problema en el trabajo, es capaz de olvidarse por completo de los problemas de Alice. Al pasar los meses y años poco a poco fue perdiendo la conciencia de las necesidades de Alice.
El precio que paga Henry es que pierde la apreciacion y la aceptación genuina de Alice, podrá recibir más pero también Alice paga un precio y es que cada vez recibirá menos y aumentara su resentimiento.
Cada día que pasa, su capacidad de apreciar, aceptar y confiar en su compañero disminuye; le resulta imposible, brindarle el amor que él necesita. Cada vez que Henry se esfuerza por hacer algo especial o agradable, el resentimiento acumulado de Alice le impide sentir su apreciación natural hacia el gesto amoroso de su marido.
Parece que las mujeres llevan la cuenta de todo
Henry ignora que las mujeres tienen una enorme capacidad de dar sin recibir, pueden dar y parecer felices aunque en su interior llevan la cuenta. Las mujeres son muy buenas para esto. Pueden dar porque suponen que algún día el puntaje quedará empatado, que su pareja estará tan agradecido que le devolverá todo el apoyo. Y entonces podrán relajarse y dejar que las cuiden un poco. La mujer puede dar en una proporción de 20 a 1 antes de empezar a quejarse, creo que podrían empezar a quejarse antes de que la cuenta sea tan alta.
Si tan solo supieramos
Estos ejemplos dejan ver qué no entender las diferencias es fuente de problemas. Teniendo conciencia, es posible empezar a resolver problemas muy viejos.
Por ejemplo Patrick podría apoyar a Jennifer escuchándola y explorando sus sentimientos cuando está molesta, se daría cuenta que al tratarla como a un hombre la desvaloriza y la perturba más.
Jennifer por su parte podría llegar a comprender y apoyar la necesidad de Patric de alejarse cuando se siente estresado y Patric podría aprender a darle seguridad a Jennifer de que estará a su lado aún cuando se retraiga por un lapso de tiempo.
Si Alice comprendiera bien a los hombres sabría que son un poco como los bomberos: si hay un incendio hacen todo lo necesario para extinguirlo; de lo contrario descansara hasta prepararse para el siguiente incendio.
Los hombres reaccionan al resentimiento femenino volviéndose pasivos y perezosos. El hombre responde mucho más al pedido de una mujer, cuando no hay resentimiento, sacrificio o sufrimiento.
También es necesario comprender que las mujeres dan más cuando se sienten amadas. Como si viniéramos de diferentes planetas, lo más probable es que sintiéramos un interés inmenso en comprender las diferencias. Al tratar de entender, seríamos pacientes y tolerantes.
Conclusión
Las mujeres y los hombre aunque somos de la misma especie somos muy diferentes sobre todo en la forma de responder a los diferentes estímulos sensitivos, producto de la vista, el olfato, el oído y el gusto, así mismo somos diferentes en la forma de entender nuestra función en el mundo de acuerdo a nuestro género.
Por eso yo recomendaría que nos pongamos a trabajar y fomentar el deseo de comprender a nuestra pareja con actitud de aceptación, esta es la base de una relación positiva, amorosa y duradera. Dar a la persona amada permiso para ser diferente, comprender la con estos consejos abre una nueva dimensión en dónde puede florecer el amor.
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